La Mente y sus juegos

Las Flores 💐 voltean a ver al Sol 🌞 porque él las riega de su luz, las nutre y les da la vida.
Las personas podemos ser regadas de amor pero el defecto del ser es voltear hacia diferentes lados donde no nos nutrimos o hacia dentro donde nos ensimismamos (llenando o tapando las inseguridades), no nos da vida al ser en plenitud.
Los Caracoles 🐌 tienen tan blanda su piel que la naturaleza les crea un cuerpo ajeno donde son protegidos de todo el exterior, las gotas

de lluvia para ellos son golpes, el aire simple para ellos son ráfagas mortales. Ellos solo fluyen y se protegen por instinto; donde su búsqueda es encontrar a otro caracol para tener a su compañero de vida.
Cuando sale el sol salen al exterior a llenarse de su luz y salen sus ojos 👀 a lo más alto de su ser, donde secan su húmedo interior llenándose de vitalidad.
Nosotros protegemos nuestro interior de forma menos natural, con mentiras y falsos  caparazones (mentiras, manipulaciones, chantajes, miedos; vivir en el escape o tratamos de imponernos ante nuestra simple manera de ser) que alteran la verdadera naturaleza; Ser felices.
La naturaleza de la vida es sabia cuando la mente no trabaja, solo el ser en su evolución natural.
Regar esa luz espiritual y protegernos con el amor sin caparazones. Fluir el día a día.
Las Hormigas 🐜 son otro claro ejemplo de instinto. Ellas viven en comunidad y demuestran que en comunidad son capaces de generar grandes hogares llenos de alimento, generando hermosos caminos donde una se sube arriba de la otra para llegar más alto y encontrar nuevas veredas, donde la última hormiga es jalada por la penúltima y no dejando a ninguna fuera de su ruta; con la ayuda de todas conservan su fortaleza individual.
Nosotros los seres al meter la mente solo vemos como llevar ventaja, sacar a alguien del camino y encerrarnos de la hostilidad externa llegando a vernos diferentes al resto y debilitando nuestra fortaleza individual, engañando a tu compañera o compañero, dejándolo fuera de la ruta.
Lo que nos separa de todos los seres es el mal uso de la mente.
Volviéndonos racistas de nosotros mismos e imponiendo diferentes “verdades” individuales, juzgando y defendiéndonos de creaciones mentales, separando al hombre de la mujer, al indígena del hombre en vida consumista. Al naco del burgués.
El machista de la feminista.
La Humanidad somos una, las diferencias son oportunidades de nutrirnos y nutrir al de enfrente con nuestras realidades, creando puentes no muros.
Dar la mano y recibirla.
Comprender y no juzgar.
Darnos la importancia colectiva nos da la importancia individual. No al revés.
Fluir como grupo crea grandes imperios.
Menos mente, más Amor.
Reciprocidad constante.
No soy Íker ajeno a los demás. Tan solo uno más pero siendo parte de un todo.
Esto es lo que fortalece mi individualidad.